La vuelta al cole incrementa los dolores de cabeza en niños

La vuelta a las aulas se considera de manera tradicional un dolor de cabeza para los padres, que tienen que asumir, después de las vacaciones, un gran número de tareas tales como la compra de libros y material escolar, ropa y calzado, elegir actividades extraescolares, reorganizar los horarios, etcétera. Un estudio llevado a cabo por el Nationwide Children’s Hospital, en Estados Unidos, pone de manifiesto que la vuelta al cole supone también un dolor de cabeza para muchos niños, en sentido literal.

Ann Pakalnis, directora de la Clínica del Dolor de Cabeza Integral del Nationwide Children’s Hospital, es la autora de este estudio cuyo cometido era descubrir si había alguna época del año en que las cefaleas de los más pequeños eran más frecuentes. Para ello, recopiló y analizó más de 1.300 informes de visitas al pediatra de padres que habían llevado a sus hijos a la clínica a causa de un dolor de cabeza. Los resultados mostraron que las consultas por este tipo de dolencias eran mucho más frecuentes en otoño que en cualquier otra época del año.

La mayoría de las consultas diagnosticaba una cefalea de tensión o migrañas como causa de las molestias. Según Pakalnis, “se ven muchos dolores de cabeza en los niños, de cinco a nueve años, y en los chicos mejoran según se acerca el final de la adolescencia. En las chicas adolescentes, las migrañas se presentan por primera vez durante la pubertad, y desgraciadamente tienden a persistir hasta la adultez”.

El incremento de cefaleas en otoño puede deberse a distintos motivos, según la experta: principalmente por motivos académicos, cambios de horario y un aumento en el número de tareas; pero también pueden aparecer por la falta de sueño, saltarse las comidas, una baja hidratación, el exceso de cafeína, la falta de ejercicio o demasiada exposición a las pantallas.

Howard Jacobs, especialista del Nationwide Children’s Hospital, recomienda seguir una serie de pautas para evitar los dolores de cabeza: comer tres veces al día, dormir las suficientes horas por la noche, echar alguna siesta durante el día, beber suficientes líquidos y hacer diferentes actividades para evitar el estrés y la ansiedad. Algunos medicamentos como el ibuprofeno pueden ayudar en los peores casos, pero se debe evitar depender mucho de ellos, ya que pueden causar dolores de cabeza más intensos.



 Via dmedicina.com