Qué hacer para prevenir la bronquiolitis

Cuando la epidemia alcanza sus mayores niveles al año, entre diciembre y enero, recuerda estas siete medidas que pueden evitar la enfermedad, sobre todo en niños menores de 2 años, los más vulnerables

Entre diciembre y enero sucede el pico de la epidemia de la bronquiolitis, que en el 80% de los casos en bebés, es causado por el virus respiratorio sincitial (VRS). La bronquiolitis suele ser un proceso con pocas consecuencias en adultos y mayores de dos años con buenas condiciones de salud, pero que puede ser grave en lactantes, prematuros o personas con cardiopatías congénitas, síndrome de Down o enfermedades pulmonares crónicas.

Para prevenirla, la campaña #StopBronquiolitis de la Alianza Aire aconsejan las siguientes medidas de prevención en la familia, las guarderías y los colegios:

-Lavar frecuentemente las manos con agua y jabón, un hábito que debe practicarse más veces si se está en contacto con bebés, así como cada vez que se estornuda o se tose. Es conveniente también lavarse las manos al llegar a casa, o después de viajar en transporte público.

-Limpiar los objetos con los que esté en contacto el bebé, así como de superficies que hayan podido estar en contacto con un enfermo, extremando estas medidas en guarderías y centros escolares.

-Evitar los ambientes cerrados y muy cargados, así como aquellos donde puede haber enfermos, especialmente si se acude con un menor de dos años o un niño o niña especialmente vulnerable.

-Huir de los ambientes de humo. Si se frecuentan, cambiarse de ropa al llegar a casa si hay bebés en ella, especialmente si pertenecen a los grupos de riesgo.

-Utilizar pañuelos desechables así como toallas de un solo uso en espacios públicos.

-Hacer una ventilación diaria de los hogares así como de los espacios públicos.

-Consultar al especialista si hace falta utilizar un tratamiento farmacológico de uso hospitalario, inmunoprofilaxis con anticuerpos monoclonales, de administración mensual, que suele recomendarse a menores de dos años que hayan requerido tratamiento para la displasia broncopulmonar en los últimos 12 meses, los que tengan cardiopatía congénita hemodinámicamente significativa, los nacidos prematuramente a partir de enero con menos 29 semanas de gestación, sin patología de base, y los prematuros nacidos a partir de abril después de la semana 29 y antes de la 32 y que tengan menos de 6 meses al inicio de la estación epidémica.

Via elcorreo.com