Los centros de salud malagueños diagnostican cada mes 718 casos de menores con exceso de peso por malos hábitos
Ya sea por cuestiones económicas, culturales o educacionales, la obesidad infantil se está cebando con las familias más desfavorecidas, aumentando más si cabe los problemas de desigualdad que sufre este colectivo. Así lo advirtió ayer la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, que anunció que el departamento que dirige, junto a la Consejería de Educación, van a analizar este fenómeno para tomar medidas al respecto que se sumen a las ya existentes como las tres comidas diarias en los colegios públicos.
Para intentar frenar esta «epidemia mundial especialmente preocupante en el caso de niños y niñas», la Junta de Andalucía puso en marcha en 2007 un plan contra la obesidad infantil del que cada año se benefician miles de menores. Este proyecto, denominado Plan Integral de Obesidad Infantil (Piobin) se ha quedado corto ante la coyuntura económica actual, lo que ha llevado a la Consejería de Salud a plantearse nuevos retos centrados en los hogares con menos recursos, tanto en obesidad como en nutrición en general.
«Esas familias están padeciendo especialmente este tema y es un elemento a tener en cuenta, por lo que profundizaremos en él para ver qué otras cosas se pueden hacer», señaló Sánchez Rubio, que hizo hincapié en que en ocasiones la obesidad tiene su origen, no tanto en los problemas económicos, sino en el desconocimiento. «En muchas ocasiones una ensalada es más barata que un bollo edulcorado», apuntó.
Más de 4.000 diagnósticos
Por uno u otro motivo, los niños con este problema se pueden contar por cientos. Solo en los primeros seis meses de este año los centros de salud malagueños diagnosticaron 4.307 casos de menores de 6 a 14 años con exceso de peso, lo que supone una media de 718 al mes. Así lo puso de manifiesto ayer la responsable del programa Piobin, Begoña Gil, que señaló que de estos diagnósticos han generado 4.157 citas individuales y 766 citas para intervenciones grupales.
Aunque estas cifras están prácticamente estabilizadas, según Gil se prevé que aumenten en los próximos años por la mayor prevalencia de este problema en familias con escasos recursos. En este sentido, se refirió a la discriminación que sufren las personas obesas, que además de problemas de salud, «van a tener menores oportunidades laborales».
Según las últimas estadísticas de las que dispone la Consejería de Salud, pertenecientes a una encuesta realizada en 2011, el 40% de los niños y el 36% de las niñas menores de 15 años tienen exceso de peso. Un porcentaje que no sorprende si se tiene en cuenta que sólo la mitad de los menores comen fruta a diario y únicamente el 27% hace lo propio con las verduras; mientras que nueve de cada diez consume cuatro raciones de dulces y chucherías y el 92% toma refrescos y bebidas azucaradas.
Este problema va cobrando importancia en los colegios y las familias, tal y como demuestran los datos referentes al Programa de Alimentación Saludable y Ejercicio Físico en la Escuela que, en el marco de Piobin, atendió el pasado curso a 32.227 alumnos de 176 centros educativos. En cuanto al proyecto 'Por un millón de pasos', para fomentar el ejercicio diario a través de paseos y senderismo, los niños y padres participantes han dado 46 millones de pasos durante el curso 2012/13 en la provincia de Málaga.
Los profesionales sanitarios que trabajan en la prevención y el control de la obesidad infantil pueden estar en contacto a través de una red (www.lareddelasandia.org) que se puso en marcha en 2011 y que ya cuenta con 700 participantes que comparten sus inquietudes y experiencias. Ahora, además, este canal se ha abierto a las familias.
Via diariosur.es
miércoles, 9 de octubre de 2013
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