Técnicas de relajación para niños

Hoy en día, incluso los niños tienen que lidiar con el estrés de una vida ajetreada y exigente: las notas del colegio, la separación de los padres, el bullying, las actividades extraescolares son algunas de las preocupaciones de los más pequeños hoy en día. Por esta razón, son muy útiles las técnicas de relajación para niños, ya que permitirán mediante sencillos pasos ayudarlos a calmarse física y emocionalmente.

Algunas técnicas de relajación para niños

Respiración profunda

La respiración profunda ayuda a relajar a los niños, ya que disminuye la tasa de respiración, la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Además es muy sencilla, ya que solo consiste en realizar respiraciones profundas con una mínima pausa entre inhalación y exhalación, ampliando el abdomen y no el pecho. Es recomendable que el niño la realice acostado o sentado.

Música

La música puede ser un potente relajante del niño, sobre todo antes de dormir. Debemos buscar que sea música suave, que disminuya el ritmo de los latidos del corazón. Puede ser música clásica, instrumental o incluso religiosa. Lo más importante es permitir que el pequeño elija su música favorita, que lo ayudará a relajarse y distraerse de sus preocupaciones.

Ejercicio

Todos sabemos que hacer ejercicio con regularidad libera endorfinas, conocidas como la hormona de la felicidad y la relajación. Puede ser cualquier tipo de ejercicio, aunque muchos padres optan por el yoga. Incluso luego del ejercicio, nuestro hijo puede hacer una pequeña rutina extra de relajación, acostado deberá ir aflojando poco a poco todos los músuclos. Así completará el proceso.

Otra forma de ayudar a la relajación del niño es acostándolo boca arriba, pidiéndole que tense los músculos de un dedo del pie, manteniendo la posición durante diez segundos. Lo repetiremos cuatro o cinco veces.

Meditación

La meditación es la mejor forma de relajar la mente, aunque no es fácil de realizar. Los niños necesitan realizarla individualmente, pero con un guía que les enseñe. Primero debe enseñarle a respirar, luego a alejar todos los pensamientos y distracciones de su mente, hasta que finalmente podemos explicarle cómo transmitir mensajes positivos a su cuerpo y mente. Además de más relajados, los niños estarán más confiados y positivos.

La risa

La risa nos hace rejuvenecer y sentir mejor, al tiempo que ejercita los músculos faciales. Debemos darle a nuestros hijos razones para que se rían y den positividad a sus vidas.

Visualización

Imaginarnos lo que nos gusta nos hace sentirnos más relajados. Con los ojos cerrados, el niño imaginará sus sueños, lo que lo hará sentirse más relajado y feliz. La introversión es un paso más allá, que puede resultarnos muy difícil pero es efectivo. Mediante este método podemos averiguar de dónde proviene exactamente el estrés, se reflexiona sobre uno mismo y se ayuda a resolver los problemas.

Estas técnicas de relajación para niños les permitirán reducir los niveles de ansiedad, aprender a manejar el estrés, mantener la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la respiración en parámetros normales, liberan la mente y consiguen una relajación total, aumentan la confianza y el positivismo de los más pequeños de la casa.

Via otramedicina.com