Esta terapia alternativa es milenaria, en la China Imperial y el antiguo Egipto eran utilizados ciertos pigmentos y tinturas para aliviar algunas enfermedades. Por ejemplo: el color amarillo era utilizado para estimular el sistema nervioso, el rojo para lo físico y mental, y el azul para los resfriados.
Hoy en día, escoger y usar los colores adecuados de la ropa y el entorno de su hijo, ayudará a que su crecimiento sea más sano y feliz. Por ejemplo, está comprobado desde 1984, que exponer a un niño al color azul por varios días, logra convertir la bilirrubina en una sustancia soluble, que luego el bebé elimina mediante la orina y las heces.
Es por ello que escoger el color de la ropa que va a usar no es un hecho casual, si escoge por ejemplo vestir de naranja es porque está un poco bajo de energía.
Algunos colores y sus efectos
Para que su bebé logre dormir de forma placentera, puede ser tratado con luz roja y violeta, los efectos los verá a corto plazo. Ahora bien, esto debe ser aplicado por un especialista.
El verde, por su parte, es el color de la naturaleza, por ende, es uno de los que está más presente en la vida del bebé, y según dicen los expertos, juega un papel muy importante en su equilibrio metabólico.
El amarillo levanta el ánimo, pero debe tener cuidado porque el hecho de ser un estimulante, puede poner nervioso al bebé, ya que está demostrado que si tienen mucha presencia de este color en su habitación llorará más.
Estos son algunos de los colores y la influencia que tienen sobre los niños, todo está en conocer sus efectos y saber combinarlos para lograr el equilibrio.
Via canalizacionenergetica.com
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